Para mí empezar a trabajar con Digestiones Emocionales ha supuesto un camino de esperanza. Ha sido un antes y un después en mi vida. Empecé a ver que sí había una salida.
Desde la primera sesión ya empecé a notar los cambios. Para mí ha sido la mejor inversión que he hecho en mi vida, tanto de tiempo, de esfuerzo, económico, porque es una forma diferente de abordar lo que nadie me ha sabido abordar desde otros ámbitos, la mejor elección que pude hacer.